Este artículo te descubre el maravilloso y delicioso mundo de la cata de AOVE. Aprenderás a realizar una cata de aceite de oliva virgen extra como experto en la materia. Te guiaremos, paso por paso, en esta apasionante aventura multisensorial para que puedas valorar los atributos y propiedades de este bien tan preciado y saludable. Te sorprenderá lo que serás capaz de descubrir.
Ha llegado el momento de ponernos manos a la obra. Primeramente, es necesario aclarar que cata y degustación no son sinónimos entre sí, sino que existe una clara diferencia entre ambos conceptos. Mientras que el primero implica realizar un análisis reflexivo y sensorial; el segundo tiene el fin de buscar el placer y la satisfacción personal a través del propio alimento.
Aclarada la cuestión, es importante decir que, en el mundo oleico existen una serie de pautas a seguir para así descubrir todas las propiedades organolépticas de un AOVE Premium como nuestro 5 Elementos.
La primera de ellas tiene que ver con los materiales que vamos a utilizar. En este caso, un vaso de cristal oscuro de base ancha y el llamado vidrio de reloj: una especie de tapa de cristal que impedirá que los aromas se volatilicen antes de tiempo.
Con nuestros enseres ya preparados, verteremos aproximadamente 15 ml de aceite de oliva virgen extra La Pontezuela y, una vez tapada la copa, lo calentaremos con nuestras propias manos. Realizaremos además movimientos rotativos suaves para recubrir de aceite las paredes del recipiente.
Es importante atemperar la copa para poder valorar el aceite de oliva en las mejores condiciones. La temperatura óptima será, al menos, de 28 ºC.
El juego de los sentidos.
La fase inicial de la cata arranca poniendo a prueba el olfato. Acercaremos la copa a la nariz para sentir el aroma del aceite. El análisis olfativo nos trasladará a un recuerdo en concreto y relacionaremos ese aroma con frutas, verduras, hortalizas, hierbas aromáticas…
Si tapamos la copa y la volvemos a abrir para una segunda olfacción, te sorprenderá la cantidad de notas aromáticas (frutado) que, por ejemplo, tiene un buen aceite virgen extra.
Cuando es el sentido del gusto el que entra en escena, percibiremos los componentes volátiles aromáticos del AOVE. Para ello, tomaremos un pequeño sorbo de aceite (cantidad similar a una cucharita de postre) y lo repartiremos por toda la cavidad bucal. Primero, sin tragar el aceite y luego haciéndolo pasar muy despacio a lo largo de nuestra garganta.
¿Qué percibes? Seguramente los estímulos de dulce, amargo y picante que esconde el AOVE. Incluso, notarás la densidad del aceite y la persistencia retronasal. Es decir, el tiempo que es capaz de permanecer esas sensaciones tras la ingesta.
Valorando el análisis de sensaciones.
La cata de aceite de oliva virgen extra nos permitirá detectar atributos positivos o negativos.
Los primeros hacen referencia a frutado, amargo y picante. Características propias del AOVE y que hablan de una aceituna saludable y fresca.
Por el contrario, si el análisis sensorial te transmite percepciones negativas de humedad, avinado o, incluso, de rancio es porque te encuentras ante un problema de mal manejo del fruto desde al campo a la producción o de deficiencias del aceite durante su proceso de fabricación, envasado o almacenamiento.
Una vez detectado si existen o no defectos por vía nasal o gustativa, la clasificación se determinará evaluando entre 0 y 10 la intensidad del frutado, del amargo y el picante.
La cata del AOVE más premiado.
Siempre es un orgullo para nosotros decir que nuestro aceite de oliva virgen extra de Finca La Pontezuela está considerado como uno de los mejores AOVE del mundo. Por eso, cuando afirmamos que la cata de nuestro aceite es una experiencia única es porque así lo han manifestado los apasionados de la cultura gastronómica, que han decidido vivir la experiencia con La Pontezuela.
Sumérgete en la experiencia del AOVE 5 Elementos y descubre el maravilloso y delicioso mundo de la cata de AOVE, con sus diferentes matices. Es algo irrepetible. Los sentidos hablan por sí solos y son capaces de trasladarte a un mundo totalmente desconocido y, al mismo tiempo, apasionante.
En La Pontezuela te invitamos a que conozcas nuestra historia, a que recorras las interminables hectáreas de nuestra finca y, por supuesto, a que te adentres en la cultura oleícola para descubrir en primera persona de dónde emana el AOVE más reconocido de toda la comarca y hasta del mundo entero.
