¿Alguna vez te has preguntado cómo se hace el aceite de oliva? ¿Cuál es el camino que sigue desde su recolección del árbol hasta su envasado? ¿Cómo se procesa el producto en la almazara? Vamos a intentar contestar a esas preguntas.
Cómo se hace el aceite de oliva, el método de producción
Quitando que ahora se ha mecanizado el proceso (para ahorrar esfuerzos y tiempo), el método de producción del aceite de oliva es el mismo que seguían nuestros antepasados.
Lo primero es recolectar las aceitunas cuando estén en su punto óptimo de maduración. Hay distintos métodos de recolección: a mano, por sacudido, por vareo o con paraguas. Una vez recolectadas, han de llevarse rápidamente a la almazara para su procesado.
Aquí empieza la segunda fase. En la almazara, las aceitunas se separan: por un lado las defectuosas y por otro las sanas. Estas últimas se limpian para eliminar hojas, tallos o polvo que puedan traer del campo, y se lavan solo con agua potable. Una vez limpias, se pesan, se cogen muestras para hacer los análisis pertinentes y se clasifican según su variedad.
La molturación o molienda
Acto seguido hay que moler el fruto. Se debe hacer dentro de las 24-48 horas siguientes a la recolección para evitar su fermentación y oxidación. La molienda de las aceitunas consiste en triturar y romper, con molinos de muelas de piedra o con triturados metálicos, el fruto para que libere el aceite. Se obtiene una pasta homogénea que se somete a prensado en frío para sacar el aceite y agua vegetal.
La siguiente fase del proceso de producción del aceite de oliva en la almazara es batir esa pasta. Las gotas de aceite forman una parte oleosa que se puede separar fácilmente de la acuosa (el agua de la aceituna), de la sólida (el orujo, que es la suma de la piel, la pulpa y los huesos rotos) y la líquida (los alpechines, que sirven para la producción de jabones) gracias a la decantación. Esta decantación, que puede ser natural o por centrifugadoras verticales, evita la alteración de la calidad del aceite.
Una vez finalizado esta última fase ya tenemos el aceite de oliva. Pero el proceso de producción no se acaba aquí, ya que queda un aspecto fundamental: la conservación. Para que llegue al consumidor con todas sus cualidades, el producto debe almacenarse en depósitos de acero inoxidable, a temperatura suave y en la oscuridad. Cualquier almazara actual tiene estos espacios totalmente preparados. El objetivo es mantener el aceite de oliva con todas sus propiedades inalteradas hasta que llegue el momento del envasado para venderlo al consumidor.
¿Cómo se hace el aceite de oliva en casa?
Aunque el proceso de producción parece sencillo y algunos se atreven a hacerlo en casa, reutilizando diversos cacharros como barriles de cerveza o paelleras, es más complicado de lo que parece. Hay que separar las distintas partes de la pasta, distinguir entre el aceite de oliva apto para el consumo y el de baja calidad, que debe ser refinado para que se pueda consumir, y conservarlo en unas condiciones de luz, aire y limpieza muy especiales. Por eso, aunque ya te hemos explicado cómo se hace el aceite de oliva, la manera más fácil de conseguirlo y que éste sea de la mejor calidad es comprarlo en la tienda online de La Pontezuela.
