Nuestra finca ha sido una de las tres seleccionadas en Castilla-La Mancha para la segunda fase de un proyecto demostrativo y científico internacional, que investiga la viabilidad de implantar un modelo de olivicultura que conjugue el enriquecimiento de la biodiversidad, la producción de AOVE de máxima calidad y la rentabilidad de la actividad. Descubre cómo La Pontezuela participa en el Proyecto LIFE Olivares Vivos +.

El proyecto LIFE Olivares Vivos + (2021-2026) constituye la fase de replicación de un proyecto coordinado por SEO/BirdLife que inicialmente se desarrolló en fincas de Andalucía.

En ellas, se realizó una investigación científica junto con el CSIC y la Universidad de Jaén, sobre cómo puede contribuir al enriquecimiento de la biodiversidad un modelo de olivicultura basado en armonizar el respeto a la naturaleza, con la producción de aceites de oliva virgen extra de la máxima calidad.

El Proyecto LIFE Olivares Vivos + se sustenta en una investigación inédita hasta la fecha.

El estudio ha sido el más importante acometido dentro de este campo en todo el mundo, como lo revela el hecho que se encontrasen 750 especies distintas de plantas y 180 aves, que suponen respectivamente el 8% de la flora vascular y más del 25% de la fauna avícola que hay actualmente en España. Además, se documentaron más de 60 especies distintas de hormigas.

Pero lo que más acredita lo exhaustivo de la investigación es el descubrimiento de una nueva especie de planta que habita en los olivares, la Linaria qartobensis, a lo que se añade también el «redescubrimiento» de una especie de hormiga que se creía extinta: la Aphaenogaster gemella.

Finca La Pontezuela contribuirá a dilucidar la replicabilidad del modelo.

Los datos del estudio respaldaron la contribución que puede hacer este modelo de agricultura olivarera a la conservación e impulso de la biodiversidad.

Para corroborarlo, los impulsores del proyecto apostaron por replicarlo, y extenderlo desde las 20 fincas andaluzas donde se implantó el sistema originariamente (2015-2021), hacia explotaciones repartidas por toda España, Grecia, Italia y Portugal.

Fruto de esta iniciativa, surge el Proyecto LIFE Olivares Vivos + (2021-2026), en el que en su dimensión nacional participan fincas de Castilla-La Mancha, Extremadura y Comunidad Valenciana. Mientras que, a nivel internacional, se han sumado fincas del Alentejo portugués, las regiones de Lazio y Toscana, en Italia, y del Peloponeso y Creta, en Grecia.

La Pontezuela participa en el Proyecto Olivares Vivos +

La Pontezuela precisamente ha sido una de las tres explotaciones castellano-manchegas elegidas para tratar de demostrar que es factible este modelo de olivicultura, que concilia la producción de AOVE de máxima calidad, la reversión de la pérdida de biodiversidad y la sostenibilidad de la rentabilidad del olivar.

Además, el proyecto permitirá poner más en valor todavía a los aceites de oliva virgen extra, que podrán unir a su condición de alimento referencial por sus propiedades organolépticas, nutricionales y saludables, la distinción de convertirse en el primer producto agroalimentario de Europa con una contribución certificada a la preservación de la biodiversidad.

La importancia del modelo Olivares Vivos + para la conservación del medio ambiente.

Estos modelos agrícolas compatibles con el medio ambiente resultan claves para los agrosistemas, al mantener y mejorar los servicios ecosistémicos básicos, como el desarrollo de una óptima polinización, la mejora de la fertilidad del suelo o la mejor regulación de los procesos erosivos.

Así, con la replicación del modelo ensayado con éxito en Andalucía se quiere evaluar la capacidad del olivar para conservar e incluso recuperar especies de flora y fauna, particularmente en zonas que están amenazas por el cambio climático.

La Pontezuela participa en el Proyecto Olivares Vivos +

Para ello, los expertos del CSIC y de la Universidad de Jaén evaluarán todo tipo de indicadores de biodiversidad, tanto en vertebrados, fundamentalmente en aves, como en invertebrados, en este caso en insectos polinizadores, arañas y hormigas. En lo que respecta solo a la fauna, porque se prevé también hacer lo propio en la flora como representante del grupo trófico basal.

En definitiva, se evaluará el potencial de los «olivares vivos» para contrarrestar la pérdida de biodiversidad, pero no solo eso, ya que se buscará demostrar que el modelo es rentable, y que es posible asegurar la sostenibilidad de este tipo de olivicultura que respeta el medioambiente, bajo la aspiración última de que algún día pueda expandirse por todo el Mediterráneo.

La Pontezuela cuenta con la certificación de Olivares Vivos.

Además, la certificación de Olivares Vivos en las botellas de aceites de oliva producidas con este sistema, supondrá un importante aval, máxime teniendo en cuenta la creciente sensibilidad ambiental de los consumidores en general, y de los de AOVE en particular, de acuerdo a los estudios de mercado que también se están realizando dentro del proyecto.

En Finca la Pontezuela estamos muy satisfechos de habernos embarcado en esta iniciativa, que aflorará todos los beneficios medioambientales de una producción de vírgenes extra que tiene como base el fruto de olivos centenarios, y que está perfectamente imbricada con el entorno natural.

Finca La Pontezuela