Para asegurar que tu aceite de oliva está perfecto, son importantes algunos factores como la materia prima, el proceso de elaboración y la calidad diferenciada que ya depende en mayor medida del factor humano, y del ambiente donde lo tratemos.

La cata del aceite de oliva se convierte en un placer para quien lo saborea, ya que permite que experimente una experiencia sensitiva que, poco a poco, le envuelve y le transporta en un viaje a través del gusto, olfato y vista.

Sin embargo, es importante conocer qué tipo de hábitos y usos debemos evitar a la hora de tomar y conservar el aceite de oliva. Del mismo modo que un buen vino o una pieza de jamón ibérico requieren de una serie de rituales para su conservación, el aceite de oliva precisa contar con unas condiciones particulares para que su esencia, sabor y olor permanezcan intactos durante el mayor tiempo posible.

precio aceite de oliva

Usos no recomendados para el aceite de oliva:

  • Se ha de evitar que el recipiente en el que se conserve el aceite de oliva sea transparente. La exposición solar afecta a las propiedades del aceite de oliva, lo que hace que este pueda ver debilitado su sabor y aroma, haciendo que nuestro aceite de oliva virgen extra no conserve sus propiedades.
  • El aceite de oliva ha de ser conservado en un lugar cerrado, fresco y seco. Muchos envases de aceite de oliva son atractivos a la vista y pueden servirnos como elementos decorativos, pero se recomienda que estos sean guardados en lugares cerrados para evitar al máximo la exposición a la luz solar, al aire o a la humedad.
  • Las catas de aceite de oliva virgen extra no se han de realizar en vasos transparentes. Si bien el proceso de la cata requiere de cierta inmediatez a la hora de la realización de la misma, es importante que se realicen “a ciegas”, esto es, en vasos de cristal oscuro. El motivo por el que se hace esto es porque el color del aceite de oliva no influye en la cata, así se evita cualquier tipo de influencia en el catador.
  • El aceite de oliva ha de consumirse en un tiempo limitado, ya que la acidez del mismo va modificándose con el paso del tiempo y, para evitar la pérdida de sus propiedades se ha de tomar en el primer año desde que se extrajo.
  • Hemos de evitar adquirir aceites de oliva cuya fecha de extracción no esté indicada de manera clara en la etiqueta. Del mismo modo que la fecha de caducidad de algunos alimentos nos indica el límite temporal en el que debemos consumirlos, en el caso del aceite de oliva es la fecha de extracción la que nos muestra cuándo fue obtenido el aceite. Es importante contar con esta información para consumirlo en el tiempo indicado.
  • Bajo ningún concepto el aceite de oliva puede ser congelado. Puede parecer una obviedad, pero es una práctica que jamás se ha de realizar. Tampoco puede ser refrigerado y la temperatura idónea de conservación es de unos 20º, aproximadamente.

Algunos de estos consejos ya los conocerías, otros seguramente pertenecen al sentido común, pero, sin duda alguna, la adquisición de un buen aceite de oliva virgen extra requiere que las condiciones en las que se conserva sean las idóneas y que se eviten una serie de actuaciones que podrían debilitar sus propiedades, sabor y olor.