Si juntas dos productos estupendos como son Aceite de oliva y queso, la combinación es irresistible. Y para sacarle el máximo partido a estos dos alimentos esenciales de nuestra cultura y de la dieta mediterránea, lo mejor es hacer un maridaje perfecto, porque una buena combinación llevará consigo una exquisita experiencia de aromas y sabores que satisfarán a todos los paladares.

Aunque hoy en día el maridaje de aceite de oliva (sobre todo si es virgen extra) y queso sea una tendencia gastronómica, lo cierto es que no es nada nuevo. De siempre se han conocido las bondades de ambos productos y se sabía que el aceite de oliva ayudaba a conservar mejor el queso y para alagar su vida útil se sumergía y conservaba en aceite de oliva. Cuando lo comían se daban cuenta que el resultado eran quesos más aromáticos e intensos y se potenciaban las propiedades de ambos productos.

Maridajes de aceite de oliva y queso

Pero en el arte del maridaje de aceite de oliva y queso hay que saber qué variedad de aceite de oliva va con cada tipo de queso para que la combinación resulte más placentera al paladar. A continuación te damos una pequeña guía para que puedas saber cómo maridar bien ambos alimentos:

  • Quesos azules con la variedad arbequina. Los matices frutados de manzana y plátano de esta variedad de aceite de oliva son el complemento ideal para la intensa acidez y para el picor que a veces caracteriza al queso azul.
  • Queso manchego con cornicabra. El sabor ligeramente ácido, fuerte y muy sabroso (que llega a ser picante cuando el queso está muy curado) del queso manchego, que es una de las joyas de la gastronomía española, encuentra su combinación perfecta en los aromas de fruta verde, manzana y en el ligero picor del aceite de oliva virgen extra de la variedad cornicabra.
  • Las tortas de oveja con el aceite de oliva virgen extra hojiblanca. La utilización de cuajo de origen vegetal aporta a las tortas de leche de oveja (como la Torta del Casar) sus característicos armas lácticos y vegetales, así como un gusto intenso y ligeramente amargo. Esas características se potencian con el maridaje con la variedad hojiblanca, por sus notas de hierba fresca, almendra y su ligero picor.
  • Queso de cabra con picual. Estos quesos tienen una gran mantecosidad mezclada con aromas suaves y lácticos. Se caracterizan por una baja acidez, un picante moderado y un salado ligero. Su combinación ideal es el aceite de oliva virgen extra de la variedad picual, porque hace que esas características resalten aportando amargor, así como sus notas de frutado verde, tomate, higuera y olivo.

Podrían haber más combinaciones, porque variedades de queso y de aceituna hay muchas. Solo en España hay más de 100 tipos de queso (28 de ellos con denominación de origen protegida). Y si hablamos de aceite de oliva, existen más de 260 variedades de aceitunas, aunque las más abundantes son estas cuatro (arbequina, cornicabra, hojiblanca y picual).

El maridaje de aceite de oliva y queso, tan antiguo como la humanidad, ofrece posibilidades ilimitadas, ya sea en unas tostadas, en una ensalada o en un plato sin más acompañamiento que la combinación de los dos. La experiencia seguro que será una delicia para el paladar.